viernes, mayo 23, 2014

El que arregla las cosas.

 

Mucha gente quiere enmendar al periodismo cubano hoy día. Otros tantos desean renovar al Socialismo criollo. A los últimos hay que recordarles que tratar de insuflar algún aliento renovador a un Socialismo que no ha cambiado sus bases teóricas destartaladas es como darle jeringa a un muerto. A los primeros vale la pena hacerles una pequeña indicación; no hay que arreglar un periodismo conformista y adulón que le teme a la verdad: lo que se necesita es muchos otros periodismos irreverentes que muestren el contraste de concepciones y opiniones, inherente a una sociedad libre. Yo quiero ver al odioso partido comunista cubano convocando a sus miembros a comprar aunque sea un ejemplar del Granma, porque nadie lo quiera leer. Desespero por leer algún periodista extrayendo conclusiones de la realidad y no de las obras completas de Martí. Desestimo a cualquier escritor que para justificar la validez de sus expectativas en Cuba utilice precisamente conceptos que trajeron el actual estado de cosas. Es la lógica del argumento prestado.

Por otra parte, de ambos lados de nuestras trincheras ideológicas los profetas caguetas de ambos extremos demuestran con sus apreciaciones que dentro de cada cubano hay un dictador diminuto que nunca toma en cuenta al pueblo, al soberano. Unos dicen que hay que hacer tal cosa porque es lo justo, o lo humano, honesto, lógico, conveniente o patriótico. Nadie piensa en lo democrático.   

viernes, mayo 09, 2014

Entrevista a Alvaro Fernández.


De una cosa estoy seguro: Aruca no era un hombre sencillo. Cuando llegué a Miami en Noviembre de 1994 herido pero sin odios, quise palpar la actualidad política del lugar y el momento sin hacer concesiones a ninguna de las partes involucradas en la puja ideológica que aún perdura. Me comuniqué con tres personajes tratando de lograr una entrevista en la que nada ganarían y armado solamente de una trayectoria honesta en oposición al pececé que aún sigue siendo una anomalía en nuestra patria y habiendo sufrido la represión cotidiana de los pececitos.
Gutierrez Menoyo me recibió sin ningún tipo de medidas de seguridad ni condiciones previas, en su propia casa de la sagüesera. Huber Matos después de precauciones elementales me recibió en las oficinas del CID. Pero Aruca, tras una larga conversación con una secretaria o ayudante, me dio largas y de eso nada.
Le dije a Gutierrez Menoyo y a Huber algunas verdades desde mi punto de vista que parecieron incómodas. Las de Aruca se me quedaron en el moropo porque nunca quise decírselas en público.
La pregunta del entrevistador a Alvaro Fernández es muy reveladora. Tiene sentido únicamente en el mundillo rígido de Cuba. Es como preguntarle a Le Monde o al Corriere de la Sera cómo está el periodismo en Francia o Italia. En nuestro país el periodismo ta jolí. No porque los periodistas del Granma digan sólo las verdades cómodas para las autoridades partidistas, porque para eso le pagan. Lo que se necesita son más periódicos fuera de la órbita comunista.
Las diferencias entre el Nuevo Herald y el Miami Herald no son nada especial. Todo negocio hispano en la Florida es una caricatura del mismo negocio americano paralelo; se aprovechan del disfrute de una masa desconocedora de la lengua y la cultura del país que garantiza un mercado seguro.
La respuesta del entrevistado en cuanto a que no hay inmigrante ilegal, en abierto apoyo a Facundo Cabrales, es clásica de todo progre que por llevar la contraria a los conservadores toman posiciones imbéciles. Hay que preguntarle cuál sería su reacción si entra en su casa un indocumentado de San Pedro Sula.  

viernes, mayo 02, 2014

Desfile del primer dia del mes más largo.

Hay cosas que no entiendo:
_ Por qué hay que poner fotos de ciudadanos felices desfilando un 1º de Mayo en Matanzas o en Cacocún si dondequiera las hay.
_Por qué debe considerarse un éxito de la sociedad que desfile tanta gente en apoyo a un gobierno que es el único empleador.
_Bajo qué criterio es positivo que un inmenso número de personas se manifieste a favor del actual estado de cosas que supuestamente es consecuencia de cambios radicales comparados con el status quo que durante años fue celebrado de igual manera por la misma gente en el mismo día.
_Cómo puede seguir siendo transmitido a propósito del desfile una y otra vez un himno que reza: "Ni César ni burgués ni Dios" (tres amigos inseparables) cuando se quiere recuperar a las religiones.

Hay cosas que desconozco:
_Qué proporción del total de trabajadores por cuenta propia participó en el desfile.
_Cuál es el costo de estos actos en cuanto a gastos de transporte, logística y falta de producción y servicios.  
_Cuántos trabajadores aptos tienen trabajo y cuántos de estos son obreros vinculados a la producción.

Hay resultados lógicos en un análisis somero.
Si trabajas para alguien que te paga ese día, ¿no es razonable que participes con la mejor de tus caras?
Si de momento el gobierno y el Partido Comunista anuncian medidas totalmente contradictorias con las bases que soportaron los actos recientes, el próximo año tendremos exactamente el mismo fervor en los desfiles.
Si tantas personas se hubieran manifestado así en Nueva Zelanda, las ovejas que habrían quedado desatendidas serían ese mismo número multiplicado por 70. Eso nunca pasaría allí.
El gobierno cubano actual se mueve en las arenas movedizas de la falta de definición; quiere un ciudadano que pueda ser creyente pero apoye el sistema político. Una nueva mentalidad con la misma filosofía machacona de fin de siglo. El gobierno defiende un sistema económico en que el estado se alía a las corporaciones y no desea que se parezca al fascismo.
La nomenclatura oficial cubana se empeña en decir que quiere un socialismo próspero y sostenible pero sigue gastando dinero y recursos en un acto reiterativo de más de lo mismo.
Si la mayoría de los trabajadores por cuenta propia desfiló, se manifestó y apoyó a la organización sindical oficialista, hay pocas esperanzas de que con un levantamiento del bloqueo y las restricciones de viaje de americanos el pueblo deje de apoyar a un gobierno que no puede elegir, lo que dejaría mucho que desear de un soberano que cede sus derechos a un partido...