sábado, abril 24, 2010

La mala moneda y la leche dura.

En Marzo de 2010 el arte del espectáculo ignoraba no ya la importancia de Manzanillo en la historia y la cultura cubana, sino su existencia. En las giras nacionales de alguna orquesta popular famosa por un flautista no se incluía la ciudad donde nació el más grande flautista de la música afrocubana y uno de los mejores del mundo, el nunca bien ponderado Alberto Socarrás Estacio. No ocupa el lugar merecido en la musicología cubana nuestro órgano, aunque se pasee por las calles de Holanda. En el itinerario de la Feria del Libro dedicada a Rusia, de triste recordación para el país, nadie recordaba la ciudad que tuvo una de las más impresionantes trayectorias en la actividad editorial. El Teatro Manzanillo sólo acoge a los eventos de segunda categoría detrás de "el de la provincia", acotejado y habilitado en último momento; quizás por un muy modesto mérito de aquél: lo fundó el padre de la Patria. He visto  un artículo deportivo en un periódico nacional donde se mencionan todas y cada una de las sedes de los juegos de béisbol, excepto la del juego en que sucede lo que da título al artículo: el humilde estadio Wilfredo Pagés. En un documental sobre el delta del Cauto, hecho en Bayamo, al dar las referencias en los puntos cardinales, se ignora que Manzanillo queda al sur. Ya no interesan las ciudades, ahora sólo importan "las provincias".
El grupo de rock Moneda Dura dio su concierto en Manzanillo hace unos dias. Se reporta un gran éxito. Pues muy bien. Que al cantante, en un momento de exaltación, le dio por arengar a los jóvenes con expresiones poco ortodoxas políticamente.  Las cosas que él quería, aparentemente como el resto de los muchachos podría sintetizarse así: nuestro dinero; ir al extranjero cuando quiera; viajar a Varadero en carro propio. Mucho cuidado. En primer lugar Manzanillo tiene una juventud que carece de entretenimiento creativo y sano como el de otras ciudades, consciente del manejo caprichoso y despótico de Bayamo. En segundo lugar, todo puede peligrar, cualquier cosa se puede cambiar, menos el Socialismo. No hablo del concepto rígido de Socialismo, error en el que se ha incurrido tantas veces en el mundo. Sacrificar algo por el beneficio colectivo es parte fundamental del sistema. Tanto producto y servicio subsidiado por el estado no puede brindarse sin sacrificar dinero de cada persona. En casi todo el mundo para la gran mayoría de la gente el dinero habido decente y legalmente alcanza sólo para cubrir las necesidades básicas. Si a cada cubano le dieran su dinero y no recibiera el beneficio del bien común, se reproduciría la situación de hoy dia en el mundo; el 5% ó el 10% de la población tendría todo y el 95% pasando las de Caín para sobrevivir. Si cada ciudadano del norte de Europa, digamos Suecia, se negara a tributar casi el 80 % de sus entradas para el bien común, no habría el alto nivel de justicia social que existe en esos países. El socialismo del norte de Europa es satanizado en los medios de prensa americanos porque han moldeado un individuo egoísta, con la ayuda de las religiones, que se ofrecen como último recurso para las crisis existenciales de las personas. El Socialismo en Cuba seguirá sufriendo derrotas, lo que significa que es perfectible y que el bien resiste derrotas. Pero da lástima que tanta gloria vivida se malogre. Aún así quedará Cuba en la historia como el único pueblo que pudo resistir por cincuenta años al más grande y cruel de los imperios. Si unos tontuelos de Moneda Dura son capaces de incitar al desencanto a muchos jóvenes en Manzanillo, la ciudad donde se originan las verdaderas revoluciones en Cuba, algo anda mal.

jueves, abril 15, 2010

La Poesía de Fausto III



Estado de Sitio

Niégame corazón esta amenaza indudable del abismo
donde estoy hundido sin remedios.
Devuélveme aquel verso de otros tiempos.
Llévame lejos:
A la mañana tibia en que despierto con ojos de esperanzas
imaginándome planetas de consuelo.

Llévame corazón a tu inventario viejo
de luces y conejos  o (por lo menos)
invéntame de nuevo la sonrisa,
Renueva mi tintero.
Vela porque estas nubes de martirio,
se conviertan con prisa en mi Aguacero.


Fausto
(un día de diciembre 03)

La Poesía de Fausto II



ESOTERIA.

Se escapan las sirenas, los unicornios,
los mitos derrumbados de hombres y de historias.
Desertan  los murmullos, los caracoles parapetados al sol
las primaveras, las princesas de corceles no herrados.

Se esfuman los desversos,
las poesías de crucigrama
los violines convexos, la intriga, los misterios,
los intentos de besos de mil labios de yeso,
la miel  y las abejas, los amores perfectos.

Se van en horda inversa los leones del sexo,
los credos, las campanas, los presagios internos,
la paz y los terrores, los crímenes sin nexos,
el rocío, la venganza, los sueños que se tejen
entre olores de incienso.

Y queda tu mirada, secular, pospresente
no la dejo escapar, si no me muero.


Fausto
diciembre 2003

La Poesía de Fausto I



BÚSQUEDA.

Cuando el paso te canse y el candor se deshiele sin sorpresas
y te parezca gris la mañana y no te alcance el sol de la ternura
Cuando remiendes hieles del pasado
o perturben asuntos disolutos
que intentan renegarte
tu Alba mancillada.

Cuando el viento confunda  los caminos
de dudas y desesperanzas
o el cansancio te abrume los silencios hirientes
y confundas abrazos o restaura de besos.

Cuando el Amor te desocupe el sueño enamorado,
los  incrementos renegados, la añoranza, los “te amo”
y tus conejos nieguen sus sombreros,
“los qué dirán”, tus sonatas ocultas propiciadas
 por  tu interna  Poesía.

Cuando tu inmolación te parezca una necesidad abierta,
una vocación al nido confinado de espantos,
de trastornos y azares, de besos incompletos.

Cuando intentes completarte la vida,
deshebillarte el sueño, los muros invisibles de la letanía.
Cuando quieras fundir, recomponer tus nubes y universos,
respirar los inciensos de la ofrenda, resolverte los miedos,
la potestad y el susto
de eternas  comuniones y amparos sin perjurios.

Cuando llegue ese día….amor mío:

                        ¡¡¡BÚSCAME!!! 
Fausto.

Manzanillo en la historia cubana II


No. II Pag. 18

Descripcion de un grabado en la página 21.

ATAQUE Y DEFENSA DE MANZANILLO, EN LA ISLA DE CUBA.

Indudablemente la insurrección separatista de Cuba, está haciendo desesperados esfuerzos, dentro y fuera de la isla, en los postreros tiempos de su existencia.
Once días después del apresamiento del Virginius, el 10 de Noviembre del año próximo pasado, algunas partidas reunidas de insurrectos de la manigua, componiendo la respetable fuerza de 2500 a 3000 hombres, al mando de jefes caracterizados, Modesto Diaz y Vicente García entre otros, intentaron apoderarse por sorpresa de la importante ciudad y puerto de Manzanillo, en la costa oriental de la isla.
Eran las once y media de la noche y los mal aconsejados rebeldes atacaron la población por tres partes, logrando en los primeros momentos, merced a su audaz acometida y a la sorpresa de los habitantes, rebasar la línea exterior de torreones que la defiende; pero en la plaza de Armas se hicieron fuertes los voluntarios y los soldados del ejército que en aquélla se hallaban y alentados por su patriotismo y por el noble ejemplo que les daba su jefe superior, el gobernador teniente coronel Sr. Gutierrez, después de un fuego nutridísimo, que duró cuatro horas, rechazaron por completo al enemigo, que no huyó, a pesar de todo, sin intentar repetir en aquella ciudad las horrendas escenas de Bayamo, prendiendo fuego a las principales casas de comercio.
Hallábase en el puerto el vapor de guerra español Conde del Venadito y también los cañoneros Ardid y Ericsson, cuyos comandantes enviaron a tierra, en auxilio de los bravos defensores de la integración nacional, toda la fuerza de que podían disponer.
Los españoles leales tuvieron seis muertos y 30 heridos y las pérdidas de los insurrectos ascendieron a 80 y 120 respectivamente.
Un grabado presentamos en la página 21, hecho sobre croquis que nos ha remitido un testigo presencial: representa la escena en que, después del incendio de las casas, el cañonero Ardid y los fuertes de la plaza rompieron el fuego contra los rebeldes derrotados y fugitivos.

Manzanillo en la historia cubana I


No. XIX Pag. 311

Manzanillo. Muelles y almacenes. Alto de la Guásima. Fortín de San José.

Manzanillo es de las principales poblaciones de la costa meridional de Cuba y aun ha de llegar a mayor importancia, merced a su situación que la hace puerto de la comarca más rica y poblada de aquella parte de la isla.
Tiene buena ensenada y bahía, calles rectas y anchas y regulares edificios, y en sus alrededores hay muchas y muy importanes haciendas de tabaco y caña de azúcar.
Es población moderna, pues la primera de sus casas la levantó en 1784 Don José Nazareno de León, y luego comenzó el aprovechamiento de las muchas y ricas maderas de aquellos contornos.Varias veces la acometieron y robaron corsarios franceses e ingleses, achaques a que estuvieron siempre sujetas las poblaciones españolas de América, tan codiciadas de los ladrones de dichas naciones y de holandeses. Y es lo mejor, que tras este mal vino otro, que fue el ponerse a escribir de nuestra codicia y sed de oro los compatriotas de esos ladrones, con tal ahinco y muestras de indignación, que han persuadido a mucha gente de que los destructores de América, los únicos codiciosos e insaciables, fuimos nosotros, y ellos los mansos, humanitarios y propagadores de la verdadera civilización en el Nuevo Mundo; siendo lo más curiosos del caso que entre los persuadidos hay muchos españoles, según vemos todos los dias en escritos de algunos de éstos, que si supieran la verdad de seguro se arrepentirían.
A pesar de estas piraterías, Manzanillo ha ido creciendo, y hoy tiene unos 10 mil habitantes y bastante comercio. En nuestro grabado de la página 321 hallarán los lectores una vista del puerto. El alto de la Guásima toma nombre de los árboles así llamados que en él crecen.
También ha tenido esta población parte no pequeña en las desdichadas guerras de Cuba. De Manzanillo eran muchos de los que con Carlos Manuel de Céspedes se alzaron en el ingenio de la Demajagua la noche del 10 de Octubre de 1868 al grito de ¡Viva Prim!, que fue el primero de la insurreción, por razones que se van averiguando, y que pronto se cambió en el de ¡Viva Cuba libre! al que el mismo general Prim estuvo a punto de dar la razón y la victoria, según se ha probado recientemente con la publicación de importantes documentos. Los insurrectos entraron en la población y la quemaron, abandonándola después. El fortín de San José (pag. 324) se hizo a poco de este suceso, para defender la comunicación con Bayamo.

                                                                                                                     G. REPARAZ.